Redacción
Guaymas, Son.- Una ciudad limpia no es la que más se barre, sino la que menos se ensucia. En ese contexto, la promoción de una nueva cultura de la limpieza, promovida e instalada en otros jirones de nuestra patria, deberá aplicarse e infiltrarse hasta lograr el objetivo con el apoyo de todos los grupos ecologistas existentes, iniciando en el primer cuadro de la ciudad y hasta el último punto del municipio. Es aberrante no encontrar los depósitos correspondientes, como también lo es arrojar la basura a la bahía, en las banquetas, calles, avenidas y lotes baldíos con dicho pretexto.
A estas alturas es fácil definir, y vamos a hacerlo, qué es lo que más conviene a la administración pública municipal, seguir con la concesión del sistema de recolección de basura, o revocarlo por manifiesto incumplimiento, provocado, también es justo reconocerlo, por el retraso en el cumplimiento económico de parte del gobierno municipal. Que la Dirección de Ecología cumpla su función y aplique y denuncie a las empresas contaminantes de nuestra bahía, sus playas y el mismo aire que respiramos.
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